En
pleno corazón del valle del río Lima se encuentra la bonita villa de Ponte
de Lima, la más antigua de Portugal.
Puente de Ponte de Lima |
La
reina dona Teresa le otorgó carta foral de villa en 1125. Debido a su excelente
posición estratégica en un vado del río Limia, ordenó amurallarla, creando un
burgo medieval defendido por murallas y nueve torres, de las que todavía se
conservan dos, y seis puertas mediante las cuales se accedía al recinto
fortificado.
Largo de Camões, Ponte de Lima |
El
primitivo puente fue construido durante el imperio romano, del cual todavía se
conserva un trozo significativo en la orilla derecha del río, siendo el resto
producto de la obra medieval.
Es
una obra notable de arquitectura, hay pocos puentes en el país que se le
puedan comparar.
En
esta época, la zona prospera en base a la productiva agricultura apareciendo las
casas señoriales de la nobleza agrícola.
Debido
a esto, además de la magnífica belleza natural del paisaje este se ve salpicado
por diseminadas fachadas góticas, manieristas, barrocas, neoclásicas y ochocentistas,
dándole un valor patrimonial histórico cultural y arquitectónico en un marco
incomparable en todo Portugal.
Avenida dos Plátanos, Ponte de Lima |