A
escasos kilómetros de Gouveia cómo debería se encuentra uno de los conjuntos
arquitectónicos más bonitos de Portugal, la población de Linhares, en el
dominada desde lo alto por un castillo donde todavía se conservan restos de sus
murallas, con torres en las esquinas, puerta de acceso y cisternas.
También
se conserva la iglesia parroquial de estilo románico, el Forum donde se reunía el gobierno municipal y la Iglesia de la Misericordia, construída en el
siglo XVI junto a un antiguo hospital medieval.
La
riqueza arquitectónica de esta villa hacen que merezca la pena recorrerla
paseando con calma entre sus casas de piedra oscura con fachadas manuelinas y
encantadores rincones que nos trasladan a la Edad Media.